Bienvenidos a El Mundo según Cecilia

Ni en broma ni en serio sino que en ambas formas y gracias a la guìa de mi hija Elizabeth, aquì estoy dando a luz a mi cuarta intervenciòn en Internet, siendo mis anteriores websites www.cablenet.com.ni/historyarte , www.cablenet.com.ni/historia/histoper y www.cablenet.com.ni/rubendario .Soy Cecilia, historiadora y profesora de idiomas tan orgullosamente nicaraguense como nuestro rìo San Juan, tengo 48 años y 27 dìas al momento de comenzar este parto, y es un intento por saltarme la barrera de las censuras, derribar el muro de Berlìn de los convencionalismos gazmoños y evitar que mis aportes se vean entorpecidos por la mediocridad. Aquì encontrarèis mis artìculos sobre historia, mis relatos de terror que sacan tinta de la sangre de los campos de guerra de la Nicaragua violenta de los años80, mis pensamientos filosòficos y mi amor incondicional por los animales. Quizàs sea la màxima expresiòn del egocentrismo militante y el sadismo utilitario, pero os prometo que no estarèis indiferente a nada, que ya es algo en este mundo de tedio y aburrimiento. Pasad adelante y gozad, o a como dicen los "cops" en Estados Unidos: Relax and enjoy it!
Cecilia Ruiz de Ríos
31 de octubre de 2007,Managua


domingo, 18 de noviembre de 2007

el despechado conquistador de las Galias pero no de Vercingetorix


EL DESALMADO MAS ATRACTIVO: JULIO CESAR
"Tan mal te cae Julio César que nunca te has dignado a mencionarlo en tus artículos?" me pregunta un alumno mío a quien le ayudaba en un reporte que debía llevar sobre el gran dictador romano para su clase de historia. Sin querer, el niño metió la mano en la llaga y debo admitir que efectivamente, Julio César es un hombre a quien muchos historiadores sentimos gusto en odiar. Mi razón personal es que al ser criada en mucho contacto con la historia de Francia, detesto a Julio César por la forma desalmada en que mató al gran general auvernio Vercingétorix-uno de mis héroes de infancia.
Julio César, gran general, político e historiador romano, vino al mundo un 13 de julio del año 100 antes de la era cristiana. Nació en el seno de una familia muy linajudo, y desde chiquito era travieso y cruel con quien se le acercara.
Era muy apegado a sus tíos Mario y Julia. En el año 82, estaba la dictadura de Sila. Cayo Julio César(que era su nombre completo) se burlaba de Sila y se declaró en rebeldía contra él. Hacia el año 79, Julio César fue investido como sacerdote de Júpiter y procedió a romper su compromiso matrimonial con Cosutia para casarse con Cornelia. En el año 78, sintiéndose amenazado, se fue a Bitinia, donde enlodó su nombre haciéndose el amante de nada menos que el homosexual rey Nicomedes, quien lo vestía de hembra con maquillaje y sedas y luego procedía a divertirse con él. Este episodio habría de dejar una mácula permanente en el currículum de Julio César, y sus detractores-que eran mucho, habrían siempre de llamarle "la reinecita linda de Bitinia."Entre los años 75 y 74, preparándose para meterse de lleno en la política, Julio se fue a Rodas a estudiar retórica con nada menos que Apolonia de Molón, quien fue maestro de Cicerón. En 73, fue elegido tribuno militar.
En 69, su fiel esposa Cornelia falleció tras quince años de martirio matrimonial.Al año siguiente el destino le pegó un sopapo a Julio cuando su adorada tía Julia falleció. Ya para entonces era miembro del senado como inspector de Hispania Ulterior, y se le estaba desatando la ambición de manera galopante. Para el año 60 ya formaba parte del primer triunvirato con Pompeyo y Craso. Inquieto, quiso ganarse gloria militar y no tuvo mejor idea que ir a deschincacar a los galos entre 58 y 51, incluyéndose en este período la invasión a Bretaña. Fue en las Galias que se enfrentó con los aguerridos auvernios que habitaban el Massif Central de Francia, y un adolescente mechudo y hermoso llamado Vercingétorix logró unir a sus hombres para humillar en dos ocasiones a Julio, pero al final, comprendiendo que la guerra solo sangraba a su pueblo, el valiente Vercingétorix montó en su caballo Abdi, y ataviado con sus mejores galas, fue a entregar las armas a los pies de Julio César. Este gesto no sirvió para ablandar a Julio César, quien fue desalmado con el caudillo auvernio, llevándoselo como trofeo de guerra a Roma, donde varios años más tarde lo hizo ejecutar.
En el año 48, un 6 de agosto, Julio César salió vencedor en la batalla de Farsalia, y cuando Pompeyo muere se hace dictador de Roma. Un 2 de agosto derrotó en Zela a nada menos que farnaces, el hijo de Mitrídates que encabezaba una rebelión. En 45, Julio César logró vencer a los hijos de Pompeyo y hubo fiesta, vino y bacanales en Roma para celebrar su triunfo. En 44, iba a encontrar a horma de su zapato. Ya cargaba con mucho odio sobre sus espladas cuando los idus de marzo le dictaron sentencia de muerte. Un 15 de marzo del 44, Julio César fue asesinado en las gradas del senado romano, apuñaleado con ira por un tumulto de políticos, entre los cuales iba nada menos que Bruto, su hijo adoptivo a causa de su relación con la lujosa y golosa Servilia.
Pocos mandatarios han dejado tantas leyendas como Julio César. De joven era muy guapo, con una belleza casi andrógina, poseedor de una estatura respetable y buena figura además de unos ojos negros preciosos.Si bien en la madurez fue perdiendo su cabello-algo que lo enfurecía porque consideraba que le restaba atractivo-Julio nunca fue rechazado por las hembras de la especie.
Mujeriego a más no poder, tras la muerte de Cornelia se casó con Pompeya, nieta de su odiado rival Sila. Si bien él se permitía todo tipo de juegos licenciosos, no soportaba que sus mujeres gozaran con otros y cuando Publio Clodio sedujo a Pompeya tras penetrar al palacio ataviado de mujer durante una festividad en la cual solo damas podían andar sueltas, Julio César montó en cólera al ver que otro "le jugaba la comida." Si bien fue magnánimo en perdonar a Pompeya y su amante por el adulterio, postyeriormente Julio César la repudió y le dio el divorcio alegando que "la mujer del César no solo debe ser honesta sino también parecerlo," refrán que hasta la vez tiene mucha validez.
Posteriormente habría de casarse con Calpurnia, a quien nunca le guardó fidelidad. Pero el gran romance de su vida lo tuvo con una adolescente egipcia nariguda y cautivadora, Cleopatra, reina de Egipto. La sensual monarca llegó al macizo galán que era Julio César en ese entonces envuelta en una alfombra y sin más atavío que un collar de perlas. El seductor esta vez cayó rendido a los perfumados piececillos de Cleo, quien lo enloqueció tanto que hasta tuvieron juntos a un bastardo, Cesarión. Años después, Julio César habría de causar indignación al llevar con toda pompa a Cleo y su espurio a Roma, donde fue recibida con boato y el niño fue legitimado.
Julio César creía en el matrimonio solo para fines políticos, y por eso había casado a su adorada hija Julia con Pompeyo.Julio César era un hombre de increíbles contrastes. Se mostró cruel y despiadado al ejecutar a Vercingétorix tras años de cautiverio.Julio César ordenó que le cortaran la espesa y lustrosa cabellera rubia a su joven cautivo(se dice que hizo una peluca de esa melena que tanto envidiaba en el galo, para compensar su incipiente calvice. También hay quienes recuerdan que gallina que come huevos ni que le quemen el pico...y juran que Julio César estuvo perdidamente infatuado con el fornido Vercingétorix y que lo hizo matar cuando el muchacho le cantó un estruendoso no). Pero Julio César lloró a moco tendido cuando unos romanos le llevaron la cabeza de Pompeyo a Egipto, y se sintió tan herido por la pérdida de su yerno que hizo que ejecutaran a quienes habían participado en el asesinato...Como general, nunca saboreó la bilis de la derrota a nivel personal.
Vanidoso en extremo, daba a confeccionar las túnicas más elegantes, pero no dudaba en meterse al fango para dirigir a sus tropas. Y contrario a muchos militares, que al abrir la boca solo hablan disparates, Julio César siempre se preocupó por cultivar su intelecto y fue autor de numerosas obras de historia. El calendario juliano es llamado así por él, y fue suya la idea de que el año llevara 365 días. También fue quien acuñó frases célebres como el Vine, vi y vencí, la cual la dijo tras haber domado a los lusitanos. Soberbio, en una ocasión lloró ante una estatua de Alejandro Magno, considerando que nunca podría superar las proezas del legendario macedonio.
Julio César sigue siendo una de las figuras más fascinantes de la historia, desatando controversias, admiración y hasta odios viscerales, como el que me inspira a mí pero que no me nubla el juicio al afirmar que fue uno de los machos más privilegiados de la naturaleza y una figura gigantesca en la galería del tiempo.

1 comentario:

Martín L. dijo...

En realidad se cree que su relación con Nicomedes IV fue más comercial que otra cosa. César había sido enviado a Bitinia por el general Marco Minucio Thermo para solicitarle al rey ayuda militar -concretamente, una flota de naves de guerra- para el sitio a la ciudad rebelde de Mitilene, en la isla de Lesbos.
Aparentemente Nicomedes era muy tacaño y se resistía a entregar las naves gratuitamente, así que el ambicioso César, que no quería fracasar en su primera misión diplomático-militar importante, se habría prostituido al rey a cambio de la flota.
Lo curioso es que poco tiempo después él regresó por propia voluntad a la corte del rey de Bitinia con la excusa de acompañar a su mayordomo, que tenía algunos negocios pendientes en aquel país.
Saludos