LA ERUDITA Y ENVIDIADA: MANUELA SAENZ
Cecilia Ruiz de Ros
La historia a veces da unas volteretas increíbles, y la figura de Manuela Saénz, la hermosísima mujer a quien Simón Bolívar amó con pasión desenfrenada en los últimos años de su vida, pasó de ser una meretriz odiada mientras aún vivía una de las heroínas más pintorescas de nuestra América.
Manuela vino al mundo a fines de 1797 en Quito, se cree que en octubre, hija de una aventura de un español llamado Simón Saénz, recaudador de diezmos y parte de la milicia real, y una mestiza llamada Joaquina Aizpuru. Simón estaba casado con la linajuda Juana Ma. Del Campo, y siendo bastarda Manuela, era impensable que tuviera mayores privilegios. Para sacársela de encima, el padre de la chica la metió a un convento para que hiciera una buena primaria y secundaria, y no lo estuviera molestando. Manuela perdió a su madre siendo una chiquilla, y su hogar fue el Convento de Santa Catalina. Sin embargo, en 1815 daría tremendo escándalo ya siendo una hermosa adolescente, pues se enamoró violentamente de un oficial de la Guardia Real, Fausto D´Elhúyar. A pesar de jurarse amor eterno, la pareja nunca se casó, y tras su aventura pasional, la misma sociedad quiteña que criticó a su madre por haberla tenido espurio, esgrimió lacerantes oprobios en contra de la "bastarda cochina, de quien nada bueno se puede esperar". El papá de Manuela entonces la mandó a Panamá, que en ese entonces era parte de la Gran Colombia. Una vez ahí, el señor logró concertar un matrimonio de conveniencia para Manuela. Se trataba del comerciante inglés James Thorne, mucho mayor que la bella muchacha, pero con gruesas cuentas bancarias.
El padre de Manuela, machista redomado, tuvo que hacer lo imposible para que el inglés no se percatara que Manuela, en términos machistas de entonces, ya era "mercancía de segundas", y para 1822 ,Manuela ya era la flamante esposa del chele Thorne. Thorne la instaló en una lujosa casona en Lima, con otra residencia en las afueras y para el 23 de enero de 1822, Manuela fue condecorada con la Orden del Sol por haber convencido a su medio hermano, quien era capitán del ejército realista apostado en Numancia, que junto con sus oficiales pasaran al bando de los patriotas. Por la naturaleza de su trabajo, Thorne viajaba a menudo a Chile, dejando sola a Manuela con sus mascotas y sus libros. Para 1823, el destino tenía ya concertada la cita que cambiaría la vida de la hermosa Manuela.
Simón Bolívar se presentó en Lima para poner fin a la guerra civil que se había desatado ahí. Manuela había cabildeado a favor de la independencia en los círculos de adinerados y patriotas, y fue en una fiesta a beneficio de la causa de Bolívar donde por fin pudo conocer al ídolo de sus sueños. Dicen las malas lenguas-con la mía a cargo del desfile por supuesto-que al ser presentado a ella, Bolívar no lograba quitar los negros ojos del escote, y soltó baldes de baba siguiéndole a lo largo de la soireé. Manuela, por su parte, se sintió tan atraída al Libertador que obvió decoro, pudor y su honor de mujer casada para seguir a Bolívar. En octubre de 1822 fue incorporada al ejército de Bolívar a solicitud del coronel Daniel O´Leary, quien opinó que debido a su erudición y buena letra sería la idónea para llevar los archivos personales del Libertador. Fue nombrada coronela. Para 1824, en la Batalla de Ayacucho, Manuela siguió discretamente a su amado por los Andes.
Los enemigos de Bolívar, entre ellos Francisco de Paula Santander, criticaban agriamente la presencia de Manuela en las huestes del Libertador. Para inicios de diciembre de 1827, Manuela ya estaba en Bogotá por órdenes de su amante, lugar donde habitaba Bolívar desde 1820 a las afueras en los cerros de Montserrat. Para el cumpleaños de Bolívar en julio de 1828, Manuela ya tenía la suficiente confianza con su hombre como para celebrarle un fiestón ahí, y en el transcurso del mismo hizo un fusilamiento simbólico de Santander a ser "ejecutado por traición".Bolívar al enterarse de esto botó la gorra, y le ordenó mantenerse al margen de la política por el momento. Pero Manuela no se daba por vencida, y se convirtió en los oídos y ojos de su adorado Simón. Se dio cuenta de una conjura para matarlo. Las lenguas no se agitaban en vano, y en efecto hubo dos atentados contra el Libertador, uno en agosto en una mascarada (de donde salió ileso gracias a Manuela) y el segundo el 25 de septiembre, en el palacio de San Carlos. En ambos casos el Libertador debió su escape a su amante, y optó por llamarla La Libertadora del Libertador.
El 20 de enero de 1830 Bolívar presentó la renuncia a su presidencia. Estaba muy mal de su tisis, decepcionado y asqueado de la política. El 8 de mayo partió hacia Santa Marta. Al irse el Libertador sin ella, Manuela quedó a merced de los ataques de sus numerosos detractores. La llamaron Señora Tiranía, concubina del Señor Despotismo. Aunque un amplio sector de mujeres la defendía, en aquel entonces las opiniones de las hembras de la especie eran un cero a la izquierda.
Manuela no se quedó callada, y publicó un libro llamado La Torre de Babel en el cual delataba una serie de anomalías y secretos sucios del gobierno. La acusaron de actos provocativos, y a fin de año, Manuela se fue a Santa Martha a cuidar la salud minada de su amante. No alcanzó a llegar a tiempo, pues Bolívar murió echando los pulmones un 17 de diciembre. La triste noticia de la muerte de Bolívar le fue enviada a Honda a Manuela, donde ella había tenido unos atrasos en su viaje.
Partió hacia Guanacas del Arroyo, pero fue perseguida por sus enemigos. El primero de enero de 1834 Santander la desterró de Colombia, huyendo Manuela a Jamaica. En octubre de 1835 apareció por Guayaquil. El gobierno ecuatoriano la expulsó de ahí, y acabó sus días en Paita, olvidado puerto peruano donde llegaban los balleneros gringos. En una humilde casita, Manuela vendía tabaco y hacía traducciones del inglés. Fue ahí donde la conoció el gran novelista gringo Hermann Melville, autor de Moby Dick. La mala suerte acompañó a Manuela a la par de la pobreza, y en una ocasión, cayó escaleras abajo, quedando limitada a una silla de ruedas.
El 11 de agosto de 1847 supo de la muerte de su marido inglés, y los herederos de Thorne le enviaron los 8 mil pesos de la dote de Manuela, pero ese dinero se extravió quién sabe donde. Inválida, acompañada por el profesor Simón Rodríguez (ex teacher del Libertador) y teniendo correspondencia con el general O´Leary, Manuela acabó su vida injuriada, olvidada y en la más horrible pobreza. Murió de una extraña peste el 23 de noviembre de 1856, y fue sepultada en una fosa común. Sus cartas y uniformes de coronela fueron quemados, y se hizo todo lo posible por hacer de ella una figura odiada y asquerosa.
Sin embargo, la historia ha rescatado la figura de esta mujer quien ayudó sin horarios ni intereses al Libertador en su causa, hoy se le reconoce su erudición (hablaba francés e inglés, y leía a Platón, Sócrates y el Korán) y su gran valentía. El hecho que no haya mediado boda entre el viudo Bolívar (quien perdió a su única esposa siendo ambos muy jóvenes) y Manuela ha sido objeto de muchas críticas de los sectores hipócritas y gazmoños de todos los tiempos desde entonces. Manuela para muchas feministas es la inspiración y ejemplo, y para los amantes de los animales también ya que prefería darle de comer a sus caballos (cuando era coronela), perros y gatos (aún en la pobreza) que pasar bocado ella. Fruto de esta admiración galopante que siento por la Libertadora del Libertador, la gatita más cuidada de mi casa (epiléptica pero bellísima) lleva su nombre en honor a esta mujer que los latinoamericanos debemos de enorgullecernos porque nació entre nosotros.
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6 comentarios:
Hola cecilia llegue a su sitio buscando enlaces sobre hitoria por la web, y es de por si muy interesante
Observe que el material escrito sobre historia en el sitio es muy amplio y su conocimiento igual sobre ella.
Ha esctrito en alguna oportunidad aqui algun post sobre la esclavitud en la antigua Roma que me pueda apuntar?
Debo realizar una investigacion sobre la misma para un trabajo practico sobre ella para la materia historia del bachillerato, el mismo es en grupo y a mi me a tocado ocuparme de la esclavitud alli, enfocada principalmete en los aspectos en el ambito rural de la misma... Como no dispongo de bibliografia alusiva y mis conocimientos son mas que precarios sobre el tema me e tomado el atrevimiento de dejarle este mensaje, si desea darme una breve vision y carateristica del esclavo inmerso en ella y alguna bibliografia a la que pueda acudir seria de inestimable valor para mi.
Le cuento brevemente sobre la ejercitacion, esta dividida en grupos y el objeto de estudio es ROMA.
a mi me toco ocuparme sobre la esclavitud en ella,enfocada en el ambito rural
El practico esta planteado de esta manera:
-)Origen y causas de la esclavitud rural
-)caracteristicas y descripcion
-)relacion esclavo/amo
-contexto social y esclavitud
-(conclusion final general)
* Me han recomendado investigar sobre un tratado escrito sobre agricultura por Caton, donde hay nociones de lo concerniente a la practica y tambien sobre esclavitud, pero no he podido hallar esta obra en ningun sitio por el momento, y creo que esta escrita en latin.
disculpe la manera de irrumpir en su sitio, seguire leyendolo ya que es muy interesante.
saludos Cordiales, Marcos.
Estimada profesora
Me encanta su blog, su estilo y su amenidad..200% estilo nica!
Recientemente estuve leyendo sobre un personaje de la revolución francesa: José Fouché, sé que hay un famoso libro sobre él, pero no está accesible aquí; me gustaría que escribiera sobre ese famoso policia francés.
Saludos
Hola Cecilia,
Buy bello los tres blogs. Me ha gustado mucho. Te deseo sucesso.
Saludos cordiales desde Brazil:
Geraldo
Revista La Memoria de Nuestro Pueblo
Rosario, Argentina.
Año V, Número 47
revistalamemoria@yahoo.com.ar
Sumario:
La Historia Oral en el Caribe, por Laura Benadiba. Maestría en Historia de la Universidad de Tres de Febrero. Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
El pogrom de 1919 y la construcción de su olvido, por Fernando Cesaretti y Florencia Pagni. Escuela de Historia. Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario.
Los judíos textiles de Villa Lynch y el I. L. Peretz. Última parte, por Nerina Visacovsky. Escuela de Historia y Política de la Universidad Nacional de San Martín.
Acerca de la política de relocalización indígena en el área pampeana: el caso de los indios Quilmes (fines del siglo XVIII). Última parte, por Florencia Carlón. Departamento de Historia. Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Como concebimos los hechos históricos. Última Parte, por Maximiliano Rodríguez. Escuela de Historia. Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario.
Laika en el cielo con diamante, por Horacio Cagni. Escuela de Ciencia Política. Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad del Salvador.
La participación popular en los proyectos de investigación y desarrollo, por Mario Di Bella. Departamento de Filosofía. Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
La Hora de los Pueblos (continuación), por Damián Descalzo. Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires.
Memoraciones:
Enrique Santos Discépolo: Porvenir - Infamia
Le invitamos a escribir dentro del amplio campo de las ciencias sociales con absoluta libertad temática y de opinión. Sugerimos que por razones de espacio y diseño de la revista, el artículo no exceda los 30.000 caracteres, aunque esta no es condición excluyente (si su trabajo es de mayor tamaño, puede ser publicado por entregas).
Cuando lo envíe a revistalamemoria@yahoo.com.ar le solicitamos que también remita en archivo adjunto su foto personal, una dirección de e-mail donde prefiera recibir comentarios de los lectores sobre sus notas, y las referencias académicas y/o laborales (un muy sintético CV personal), todo lo cual constituirá al pie del artículo su data de autor.
Este número se puede consultar y adquirir a valor de cinco pesos el ejemplar (al igual que los números anteriores) en los siguientes lugares:
En la ciudad de Rosario:
Biblioteca " La Memoria de Nuestro Pueblo", Juan Manuel de Rosas 2101. Corpus Editorial y Distribuidora, Suipacha 581.
(teléfono 54 0341 4394978 )
Es material de consulta disponible en las bibliotecas de varias facultades de la Universidad Nacional de Rosario.
En la ciudad de Buenos Aires:
Corpus Editorial y Distribuidora, Tucumán 2120.
(teléfono 54 011 43735128)
Está también disponible para su consulta en Biblioteca Nacional, Biblioteca del Congreso de la Nación , Biblioteca de la U.C.R. y en el Centro de Documentación del Pensamiento de Izquierda en la Argentina (Cedinci).
En el resto del país (y del mundo):
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La memoria de nuestro pueblo es patrimonio de todos
Hola Cecilia. te dejé un comentario en Gateau, la musa de Guillermo de Aquitania.
Te agradecería mucho la respuesta.
Que paso con su blog? es interesante y profundo en temas es una lastima que lo descontinuara.
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