LA LANZA A CABALLO Y EL ESPECTRO A PINCEL
-Comencè con una broma sin saber que iba a gritar en serio.
-La mejor morfina para esos calambres es la del tiempo, pero es de acciòn retardada.
-La peor neuropatía que sufre la diabetes de mi voluntad la da el no saber decir no a tiempo.
-No quiero decir que me dejen en paz. Entièndase que talvez estando sola hallo la paz.
-Es curioso que tras querer filosofar al mejor estilo de los grandes estoicos el pobre confundido solo desee leer madrigales de Guillermo de Aquitania.
-El miedo es el talòn de Aquiles de los incrèdulos porque nunca esperamos que seamos capaces de sentirlo.
-La razòn que me hace rascarme la cabeza vìctima de una duda es porque usted tampoco sabe què exactamente es lo que quiere.
-No me està llevando el diablo! El diablo ya sabe cuànta confusiòn reina en mì, por eso no me quiso llevar y se me anda corriendo.
-Quiero tomar las cosas con calma pero en ningún sitio venden ese elìxir.
-El clavo de la brecha generacional entre padres e hijos es que tenemos los mismos deseos, dichos en distintas formas, pero no nos hemos dado cuenta de eso.
-Yo no puedo mandarle a ud. A donde de seguro proviene, dijo airada:a la mierda!
-Nunca estamos tan lejos de volver a ver a quienes añoramos que cuando lo acabamos de dejar y ya sentimos cavanga por ese ser.
-Vespasiano muriò de pie en honor al pueblo a quien tan bien sirviò. Solo tratemos de olvidar que el pobre emperador lo hizo en un charco de su propia caca.
-La felicidad inmerecida me asusta mucho màs que los sapos reales en mis jardines imaginarios.
-Los polìticos nos dan gratuitamente una sola cosa para sobrevivir sanamente: la curativa risa siendo ellos los bufones.
-Los gatos tienen la buena onda de hacerse inolvidables dejando sus pelos pegados no solo en nuestras ropas, sino tambièn hasta en las almas que no tengamos.
-No le quiso decir que le recordarìa tanto que aunque la otra mitad se olvidara, habrìa memoria como para los dos.
-Comencè con una broma sin saber que iba a gritar en serio.
-La mejor morfina para esos calambres es la del tiempo, pero es de acciòn retardada.
-La peor neuropatía que sufre la diabetes de mi voluntad la da el no saber decir no a tiempo.
-No quiero decir que me dejen en paz. Entièndase que talvez estando sola hallo la paz.
-Es curioso que tras querer filosofar al mejor estilo de los grandes estoicos el pobre confundido solo desee leer madrigales de Guillermo de Aquitania.
-El miedo es el talòn de Aquiles de los incrèdulos porque nunca esperamos que seamos capaces de sentirlo.
-La razòn que me hace rascarme la cabeza vìctima de una duda es porque usted tampoco sabe què exactamente es lo que quiere.
-No me està llevando el diablo! El diablo ya sabe cuànta confusiòn reina en mì, por eso no me quiso llevar y se me anda corriendo.
-Quiero tomar las cosas con calma pero en ningún sitio venden ese elìxir.
-El clavo de la brecha generacional entre padres e hijos es que tenemos los mismos deseos, dichos en distintas formas, pero no nos hemos dado cuenta de eso.
-Yo no puedo mandarle a ud. A donde de seguro proviene, dijo airada:a la mierda!
-Nunca estamos tan lejos de volver a ver a quienes añoramos que cuando lo acabamos de dejar y ya sentimos cavanga por ese ser.
-Vespasiano muriò de pie en honor al pueblo a quien tan bien sirviò. Solo tratemos de olvidar que el pobre emperador lo hizo en un charco de su propia caca.
-La felicidad inmerecida me asusta mucho màs que los sapos reales en mis jardines imaginarios.
-Los polìticos nos dan gratuitamente una sola cosa para sobrevivir sanamente: la curativa risa siendo ellos los bufones.
-Los gatos tienen la buena onda de hacerse inolvidables dejando sus pelos pegados no solo en nuestras ropas, sino tambièn hasta en las almas que no tengamos.
-No le quiso decir que le recordarìa tanto que aunque la otra mitad se olvidara, habrìa memoria como para los dos.
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